Descubre los deliciosos sabores del tradicional cachopo asturiano con esta receta fácil de seguir y útiles consejos de preparación. Elaborado con tierna ternera, jamón que se derrite en la boca y sabroso queso, este clásico plato español seguro que te impresionará. Aprende sobre su origen y variaciones, y encuentra los acompañamientos perfectos para una comida satisfactoria. ¡Prepárate para impresionar a tus papilas gustativas y a tus seres queridos con el plato de cachopo perfecto!

¿Qué es el cachopo asturiano?

Originario de la impresionante región de Asturias, situada en el norte de España, el cachopo asturiano es un plato tradicional e icónico que ha ganado popularidad tanto a nivel local como internacional. Este delicioso plato es una verdadera representación del rico patrimonio culinario de Asturias y forma parte entrañable de la tradición gastronómica de la región. El cachopo es una comida abundante e indulgente que exhibe los mejores ingredientes, artesanía y una mezcla de sabores exquisitos. Es un plato muy apreciado y solicitado, conocido por sus generosas raciones y la deliciosa combinación de carne, queso y jamón.

El cachopo es un plato asturiano por excelencia que consiste en dos grandes filetes de ternera, envueltos en un relleno de delicioso jamón serrano y sabroso queso. Los filetes se empanan y fríen a la perfección, lo que da como resultado un exterior deliciosamente crujiente y un relleno de queso y jamón fundido que hace la boca agua. El plato suele servirse con una serie de deliciosos acompañamientos, lo que lo convierte en una comida verdaderamente satisfactoria y sana, perfecta para compartir con la familia y los amigos. El restaurante Las Tablas del Campillín en Oviedo es el más premiado de todos, además son los creadores del primer libro de recetas de cachopo y celebran el Día del Cachopo cada año.

Ingredientes

Para esta receta de cachopo tradicional asturiano, necesitarás los siguientes ingredientes de alta calidad para 4 personas: 4 filetes grandes de ternera, 8 lonchas de jamón serrano, 8 lonchas de queso suave y fundente, 2 tazas de pan rallado, 3 huevos (para el huevo batido), 1 taza de harina común, sal y pimienta negra. Es esencial seleccionar los ingredientes más finos y frescos para garantizar los sabores auténticos y ricos por los que es conocido este emblemático plato. El uso de carne de ternera de primera calidad, auténtico jamón serrano y exquisito queso es crucial para captar la verdadera esencia de un cachopo que hace la boca agua.

Preparación

Crear el cachopo perfecto es un arte culinario, y el proceso paso a paso es crucial para garantizar una deliciosa experiencia gastronómica. Para empezar, coloca un filete de ternera sobre una superficie limpia y plana y, con un mazo para carne, golpea suavemente el filete para ablandarlo y aplanarlo. Sazona el filete con sal y pimienta negra, y luego coloca 4 lonchas de jamón serrano y 4 lonchas de queso sobre un filete. Coloca con cuidado el segundo filete encima, creando un «sándwich». Utiliza palillos para asegurar los bordes, asegurándote de que el relleno queda encerrado. Reboza el cachopo en harina, pásalo por los huevos batidos y cúbrelo bien con el pan rallado.

A continuación, calienta una cantidad generosa de aceite de oliva en una sartén grande y honda hasta que esté caliente pero sin humear. Coloca con cuidado el cachopo preparado en la sartén y fríelo hasta que esté dorado y crujiente por todos lados. Este proceso garantizará que la carne se cocine a la perfección y que el relleno de queso y jamón se derrita deliciosamente. Una vez cocido, pasa el cachopo a un plato forrado con papel absorbente para que escurra y repose unos minutos. Esto ayudará a eliminar cualquier exceso de aceite y garantizará una textura perfecta y no grasa.

Consejos para preparar el cachopo perfecto

Cuando se trata de preparar el cachopo asturiano perfecto, hay varias consideraciones clave a tener en cuenta. En primer lugar, la calidad de los ingredientes, sobre todo de la ternera, el jamón y el queso, es primordial. Es importante conseguir los mejores cortes de ternera y el queso y el jamón más finos y sabrosos para elevar el sabor general del plato. Además, el proceso de empanar y freír el cachopo requiere precisión y cuidado. Asegurarse de que el aceite está a la temperatura correcta y tomarse el tiempo necesario para conseguir una corteza dorada y uniforme son pasos esenciales para crear un cachopo excepcional.

Otro consejo importante es retirar con cuidado los palillos antes de servir el cachopo para evitar riesgos de seguridad. Esto debe hacerse justo antes de servir para garantizar que el relleno permanezca intacto. Además, se recomienda cortar el cachopo en rodajas gruesas, para que los comensales puedan apreciar plenamente las hermosas capas de carne, queso y jamón.

Acompañamientos

El cachopo asturiano se sirve a menudo con una serie de deliciosos acompañamientos que complementan sus ricos y robustos sabores. Un acompañamiento clásico y muy apreciado es la ración de doradas y crujientes patatas fritas cortadas a mano. Las patatas fritas son el contraste perfecto con el indulgente cachopo, y añaden un delicioso crujido y un elemento reconfortante y clásico a la comida. Además de las patatas fritas, el cachopo suele ir acompañado de una ración de vibrantes pimientos del padrón ligeramente carbonizados, que mejoran aún más la experiencia gastronómica con sus sabores ahumados y sabrosos y su suave picor.

Patatas fritas

Para preparar la deliciosa guarnición de doradas y crujientes patatas fritas, empieza pelando y cortando las patatas en bastones de tamaño uniforme. Enjuaga las patatas cortadas para eliminar el exceso de almidón y luego sécalas bien con un paño de cocina limpio. Baja con cuidado las patatas a una olla de aceite caliente, pero que no humee, y fríelas hasta que estén doradas y crujientes. Una vez fritas, sácalas del aceite y ponlas a escurrir en una bandeja forrada con papel absorbente. Sazona las patatas fritas con sal y los condimentos adicionales que desees, y ya están listas para servirlas junto a la estrella del plato, el apetitoso cachopo.

Pimientos del Padrón

Para una ración perfecta de pimientos del padrón, empieza por enjuagar los pimientos y secarlos bien a palmaditas. Calienta un chorrito de aceite de oliva en una sartén a fuego medio-alto y añade los pimientos enteros. Saltea los pimientos, removiéndolos de vez en cuando, hasta que se abollen y queden ligeramente carbonizados. Una vez cocidos, pasa los pimientos del padrón a un plato de servir y espolvoréalos con una generosa cantidad de sal marina en escamas para acentuar su sabor. Estos pimientos sabrosos y ligeramente ahumados son el acompañamiento ideal del rico y sabroso cachopo, añadiendo un toque de sabor vibrante a la comida.

Origen e historia

El cachopo está profundamente arraigado en la historia culinaria de la región de Asturias, en España, y se celebra como parte por excelencia del patrimonio gastronómico local. Sus orígenes se remontan a la rica tradición de la cocina asturiana, famosa por su énfasis en los ingredientes de alta calidad y los platos sustanciosos y sabrosos. El origen exacto del cachopo es objeto de mucho debate, pero todos coinciden en que el plato ha sido una parte muy apreciada de la tradición culinaria asturiana durante muchas generaciones, y que cada familia y restaurante ha añadido su propio toque único a la querida receta.

Con su saludable e indulgente combinación de ingredientes, el cachopo se ha asegurado un lugar especial en los corazones de los lugareños y se ha convertido en un símbolo icónico de la identidad culinaria de la región. Su rica historia y su perdurable popularidad también han contribuido a que el cachopo se considere un plato de obligada degustación para los visitantes de Asturias, ya que ofrece una auténtica muestra de la maestría culinaria y las tradiciones ancestrales de la región.

Diferencia con la milanesa

Aunque el cachopo y la milanesa comparten algunas similitudes, como su preparación empanada y frita, son platos distintos con sus propias características. La milanesa, originaria de Italia y popular en varios países sudamericanos, suele consistir en un trozo fino de carne, como ternera o buey, empanado y frito. Por el contrario, el cachopo es un plato tradicional de Asturias, España, y se reconoce especialmente por utilizar dos grandes filetes de ternera para envolver el relleno de jamón y queso, creando una experiencia gastronómica sustanciosa y rica.

Además, la milanesa suele servirse con un chorrito de limón fresco y una guarnición de puré de patatas o una ensalada sencilla, mientras que el cachopo suele acompañarse de guarniciones asturianas por excelencia, como las deliciosas patatas fritas cortadas a mano y los sabrosos pimientos del padrón, que añaden un toque regional y distintivo a la experiencia gastronómica en general.

Otras Variedades

Además de la clásica combinación de ternera, jamón y queso, han surgido otras deliciosas variaciones del cachopo, que ofrecen nuevos y tentadores perfiles de sabor. Una alternativa popular es el uso de queso Cabrales asturiano, un queso azul fuerte y picante que añade un sabor distintivo y robusto al plato. Además, algunos establecimientos ofrecen variaciones que presentan distintos tipos de rellenos, como la incorporación de setas salteadas o pimientos rojos asados, ampliando aún más la gama de texturas y sabores dentro del querido plato asturiano.

Estas innovadoras variaciones han añadido una nueva dimensión al cachopo tradicional, permitiendo una exploración diversa y creativa de esta icónica especialidad asturiana. Aunque la combinación clásica sigue siendo muy apreciada, estos giros modernos han despertado el interés de los entusiastas de la cocina y han contribuido aún más a la reputación del cachopo como símbolo versátil y duradero de la excelencia culinaria asturiana.

Conclusión

En conclusión, el cachopo asturiano es un plato delicioso y tradicional que combina tierna carne de ternera, sabroso jamón y rico queso, todo empanado y frito a la perfección. Con los ingredientes y consejos adecuados, cualquiera puede preparar este plato emblemático de Asturias, España, en su propia cocina. Así que, ¿por qué no probarlo y disfrutar del sabor de la cocina asturiana en casa?